Para los Mexicanos ha sido un día de siglos.
Con el orín sucio de eslabones de Ocupación
apestando sus muelles de todo puerto nacional.
Oreando el ácido hediondo asqueroso
de aquellos sucios invasores.
La economía, la política, la religión…
todas tejidas con el hilo de la mentira y la suciedad
de la Corona Española hasta la ahora Silla Presidencial.
Hilo bastardo en el uso por manos sucias, por un interés mezquino.
Que hasta la fecha se aprovecha de todo un continente.
Aprovechando y fomentando su ignorancia.
Para explotarlo a sus anchas.
Llegando jamás a satisfacerse.
Una tarde fue un sucio Cortez.
Ahora un Español prepotente picándole las
costillas a un Presidente Mexicano exigiéndole cuentas.
Donde quedó la virilidad?
Y no levantó una uña nuestro representante nacional.
Una uña. So pena de haber comprometido su compromiso
ya establecido. Por ende, su seguridad física y material.
Háganme el favor!
– mi General Villa, no hay cama donde dormir para usted esta noche.
– me vale madre!
– mi General Zapata, va a tener que dormir en el suelo.
– y….?
Diógenes aún seguiría buscando ese hombre honesto.
No lo habría, como el sabía, encontrado en Grecia.
Pero si en el México de nuestros héroes.
Veremos que trae la esperanza de nuestro próximo Presidente.
Ernesto Onofre