El Dios de los Judíos no es mi Dios.
Mi Dios no tiene nacionalidad.
Sexo.
Mi Dios es realmente Mexíca.
Mitad masculino. Mitad femenino.
Mi Dios no es un amargado.
Le gusta reír y carcajearse de chistes estupidos.
Como yo.
Le gustan las cosas simples.
Es un simpleton.
Como yo.
Le gusta beber. Como a mi.
Es medio lento el pobre. Como yo. Bueno, no tanto.
Más.
Es buen camarada.
Es como mi sombra
Me cuida de tropezones.
No todo el tiempo.
Como tiene millones de hijos…
Anda todo el tiempo ocupado.
Y respondiendo en millones de Lenguas…
Ay, ay, ay…pobrecito…
Ernesto Onofre