Su sonrisa. Su parsimonia para hablar. Su semblante.
Calmo. Como la un leon que no necesita rugir cuando la presa la tiene
a un metro. Un monstruo gentil. Que cualquier Niño o anciano puede
abrazar. Con una dama por esposa. Gentil y amable. De sonrisa fácil.
Un hombre algo corvo de espaldas más con un espíritu totalmente
vertical. En dirección hacia las estrellas.
Donde solo los grandes habitan.
Me encanta su voz. Su inteligencia. Lo cobrizo de su piel como la mía.
Su estatura como persona muy difícil de medir.
Si no se trata sólo de medidas mayores.
No, no estoy siendo adulador ni espero sea un día mi compadre.
Todo México sabemos que es un individuo excepcional.
Que esperamos lleve su Sexenio a un feliz final.
Viva mi Presidente AMLO.
Ernesto Onofre