Amarte hasta el Segundo Advenimiento.
Sumergiéndome en cada uno de los poros de tu cuerpo.
Hasta el fondo ida y vuelta. Para tomar aire fresco y regresar a tus
labios. Escudriñar las comisuras de los pliegues de tu sonrisa y tus
mejillas. De los pies hasta el último cabello tuyo. Ah…Sahara de piel
tibio y dulce como la miel. De lado a lado y de punta a punta.
Acariciando tus ardientes colinas y tus suaves montañas. Desde el pie
al pico de cada una. Ah, amor mío. Esto apenas comienza.
No quiero llegar hasta la cima sino dejar todo de mi en el sendero
de tu pecho. Amor mío. Jesús nos estará esperando con un destino
de maravilla. Ya verás como hasta en el mismo cielo las estrellas nos
envidian. Por ahora, dame un beso mientras comienzo mi fantasía.
No te preocupes, todo será como te lo he dicho. Y aún más todavía.
EO