Y qué necesidad del dios bíblico de haber hecho tanto

relajo? Digo. Crear al hombre…luego a la mujer…

prohibirles comer el fruto de un árbol específico…

arrojarlos de la casa…al arroyo…a hacerlos sufrir…la pobre mujer

habría de sufrir al dar a luz…no contento con todo eso…

un día amanece de mal humor y haciendo berrinche no sabemos

acerca de que cosa o cosas…oye! No estaba casado! O si?

Entonces? Pues hete que decide alzar las aguas de los mares para

ahogar a medio mundo y a la otra mitad también. No, si andaba

de un humor de perros. Quien sabe si la resaca de la noche anterior

lo había afectado…la virgen elegida para esa noche de himeneo estába

indispuesta…ya sabes, con esas cosas de cada mes…y se hubiera

sentido de lo peor y al parecer, con ganas de desquitarse de todos.

Oye…hasta la fecha. Se pregunta todo mundo.

– Oye, deveras existió tal Dios?

Yo digo que no. Y tú?

EO

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