Ser un indigente en un palacio…vacío….
con docenas de cuartos…candelabros muy ricos…
colgando del techo cual cadaveres de cristal….tu cocinero…
ocupado a veinte minutos de la sala central, preparando tu
sopa y guisado…sin ningún amigo a tu lado…
Quizás, diferente al indigente en la ciudad.
Rodeado de otros en su misma situación…
libres de qué…? Prisioneros de su mendicidad.
Dueños de su libertad?
EO